Sistemas de computación cognitiva como el Watson de IBM trabajan con enormes bases de datos en áreas como salud, educación, previsión del tiempo y finanzas.
En los cómics y en las películas, el Hombre de Hierro cuenta con la ayuda de un asistente digital con superpoderes, el Jarvis.
En la ficción, este superordenador autónomo comprende el lenguaje natural hablado por Tony Stark, además de utilizar datos captados del ambiente para generar sus propias hipótesis y ofrecer resúmenes al héroe de la Marvel, como el punto débil de un enemigo o la mejor ruta de vuelo para un lugar determinado. Sin esta ayuda, el Hombre de Hierro estaría frito.
Por más futurista que Jarvis pueda parecer, en el mundo real ya existen sistemas que funcionan exactamente como en los cómics. Y más: muchos de ellos actúan como verdaderos super-héroes, ayudando a los médicos en el diagnóstico de enfermedades complejas como el cáncer. Estamos hablando de la computación cognitiva, la tecnología que tiene este nombre debido a que su funcionamiento se encuentra paralelos en la capacidad humana de la cognición.
A diferencia de los equipos tradicionales, que siguen las instrucciones contenidas en el software para realizar sus tareas, los sistemas cognitivos reciben y procesan la información de forma independiente y autónoma. Ellos generan hipótesis sobre un determinado escenario, como el mejor tratamiento para un tipo específico de tumor, y conocimientos que ayudan a los humanos en la toma de decisiones.
Esta inteligencia artificial, con sistemas como el Watson de IBM, «piensa» por medio de avanzados algoritmos matemáticos, y es animada por una infraestructura de gran alcance para el procesamiento de una gran masa de datos.
«La computación cognitiva que permite al equipo a aprender cómo el cerebro humano, y utilizar este conocimiento«, dice José Augusto Stuchi, investigador senior y líder de la plataforma tecnológica cognitiva del Centro de Investigación y Desarrollo en Telecomunicaciones (CPqD).
Los sistemas de computación cognitiva son capaces de entender el lenguaje natural, además de texto, imágenes y otros datos considerados como no estructurados, aquellos que aún no han sido convertidos para el lenguaje de las máquinas tradicionales. Dotadas de algoritmos de aprendizaje complejos y sofisticados, ellos están capacitados para realizar una tarea determinada.
Ejemplo de sistema avanzado que utiliza la computación cognitiva Watson se hizo famoso por haber ganado humanos en Jeopardy!, un popular juego de preguntas y respuestas de los Estados Unidos. Por acceder y procesar una amplia base de conocimiento, el Watson puede ser utilizado en diferentes áreas del conocimiento.
Vea, a continuación, cinco áreas que ya se benefician de la computación cognitiva.
Educación - Gracias a la computación cognitiva, hoy en día la educación va mucho más allá de la sala de clase. Cursos en línea y apps para smartphone se complementan con los estudios.
Esto genera una enorme cantidad de datos sobre los alumnos, incluyendo los puntos fuertes y las dificultades. Sistemas de inteligencia artificial, como el Watson, son capaces de utilizar estos datos para generar planes de estudio eficientes y actuar como asistentes pedagógicos. «El sistema puede predecir los objetivos e intereses de un estudiante con base en la información de su estilo de aprendizaje, de forma que los profesores puedan determinar qué tipo de contenido proporciona al alumno y la mejor forma de presentarlo», escribe el investigador Chalapathy Neti, especialista en aplicaciones de computación cognitiva en la educación.
Finanzas - Los Bancos y las instituciones financieras son plantas de datos. Miles de millones de operaciones que se realizan todos los días, y ofrecen muchos conocimientos sobre el comportamiento de los clientes. Un sistema de inteligencia artificial que puede utilizar esta rica fuente de información para hablar con los corredores de bolsa.
Como el Watson tiene la capacidad de interpretar el lenguaje natural, la plataforma literalmente dialoga con el cliente. El reconocimiento de voz puede funcionar como un factor de seguridad en la biometría y dispensa las contraseñas numéricas. Los sistemas de inteligencia artificial también pueden ayudar al cliente a comprender mejor sus gastos y ayudar en la administración de las finanzas personales.
Pronóstico del tiempo - La naturaleza es una de las fuerzas más impredecibles con las cuales el hombre trata. El surgimiento de poderosos cerebros artificiales, como el Watson, va a ayudar a hacer frente a este enorme desafío. Véase el caso del estado de Brunéi, en la isla de Borneo, en Asia.
El gobierno utiliza la tecnología de análisis de datos para entender mejor el comportamiento del clima, lo que lleva a una mejor estrategia de administración de los recursos, especialmente la producción de alimentos.
Otro ejemplo: las empresas de seguros ya utilizan la inteligencia artificial para hacer predicciones más acertadas de los valores de las pólizas compradas en áreas susceptibles a fenómenos como los huracanes y por año.
Marketing - La inteligencia artificial puede ser utilizado en la automatización del telemarketing. El cliente puede hablar con el equipo, que dará respuestas enérgicas, muchas basadas en el comportamiento individual. Esto sólo es posible gracias a algunas de las características clave de la computación cognitiva. En primer lugar, su capacidad de entender el lenguaje natural humana.
En segundo lugar, su capacidad de almacenar y procesar un gran número de información. Esto genera repertorio y la inteligencia suficientes para interpretar las necesidades de cada cliente y generar una respuesta adecuada.
La inteligencia artificial puede ayudar a los líderes a tomar mejores decisiones y establecer una estrategia más eficiente de largo plazo, basada en datos reales acumulados a lo largo de los años.
Salud - Esta es una zona en la que la computación cognitiva ha recibido mucha atención. Las enfermedades que los médicos y los pacientes se enfrentan muchas veces son complejas, con una infinidad de variaciones que se pueden llevar a diagnósticos completamente diferentes de persona a persona.
Este es un escenario ideal para la inteligencia artificial. Tome el cáncer como ejemplo. Cada tumor tiene un genoma propio, y hoy en día los expertos saben que es necesario ir más allá, sumergirse en las especificidades de cada caso. Con la computación cognitiva, el sistema puede ayudar a los médicos a consultar una amplia biblioteca médica en su base de datos y a partir de ello, proponer tratamientos específicos para cada paciente. Esto sólo es posible porque poderosos cerebros electrónicos pueden evaluar muchos escenarios, eliminar otros, hasta llegar a aquellos que tienen más posibilidades de éxito.
Al final, la decisión será de un médico humano, así como en todas las otras áreas mencionadas. La sensibilidad y la creatividad humanas no pueden ser reproducidas en silicio.